Camino de Sant Marc

Al principio de la carretera de Age, un rótulo situado en el camino de la derecha nos indica: “Camí de Sant Marc”.

Aquí comienza realmente el itinerario reseñado. El camino, completamente llano y hoy en día asfaltado, toma claramente la dirección sur. Empezamos a caminar tranquilamente siguiendo la recta que traza estos amplios caminos. Estamos rodeados, a ambos lados, de una hilera de árboles que nos acompañarán en todo momento: fresnos, alisos, populinas, etc. Este trayecto, de unos 900 m, nos llevará hasta la plaza que hay frente a la ermita de Sant Marc. Desde aquí podremos contemplar, dando un giro de 360º, los macizos que rodean la Cerdanya: Puigpedrós, Carlit, Puigmal, Tosa de Alp, Moixeró y Cadí.

Para completar este paseo, seguiremos por la carretera local asfaltada que pasa junto a la ermita y que, en dirección oeste sigue entre prados; finalmente, pasa junto al campo de golf de Sant Marc. Debemos tomar el primer desvío a la izquierda y continuar en dirección sur por un bonito paseo, ahora sin asfaltar, con muchos árboles a cada lado. Después de dejar el Mas d’en Prat a la izquierda del camino, éste sigue entre prados y árboles hasta que una pequeña bajada nos lleva a tocar el río Segre, el cual cruzamos a través de un puente original.

Estamos en un cruce de caminos en el que los rótulos nos indican la dirección a Queixans, a la derecha, oa Puigcerdà (4.3 km) a la izquierda, que seguiremos. En esta dirección, el camino nos lleva de nuevo, por un recorrido de unos 300 metros, hasta la carretera asfaltada. La tomamos en la misma dirección hasta que encontramos el amplio puente, apto para vehículos, que vuelve a cruzar el río y, siguiendo hacia el norte, nos conduce nuevamente hasta el campo de golf y en la ermita de Sant Marc, desde de dónde regresaremos, por el camino ya conocido, al punto de salida.