Valle de Campcardós

Desde el aparcamiento situado junto al río Querol tomamos, en dirección oeste, la pista asfaltada que comienza a remontar el valle y que llega hasta un repetidor. A partir de ahí comienza la pista sin asfaltar. Esmeramos esfuerzos para remontar el primer tramo del itinerario, el más empinado, delimitado por hermosas paredes de piedra seca.

Al final de esta subida llegamos a unas vallas para el ganado, a partir de las cuales el camino ya llanea y el valle se ensancha cada vez más (30 min). Desde aquí ya tenemos las primeras vistas del Roc Colom y del Pedraforca, que presiden el valle. De vez en cuando, vemos en las rocas las marcas blancas y rojas del sendero GR 7, que viene de Andorra, y del GR 107, que viene del valle de la Llosa. Continuamos por el valle junto al río de Campcardós, que baja a la izquierda.

Mientras caminamos vamos encontrando varias chozas, de dimensiones reducidas, hechas por los pastores, con las paredes de piedra y el losado recubierto de glebas de hierba. Un tramo más llano nos conduce a una subida, perfectamente empedrada, que subimos sin dificultades. Al llegar a lo alto de esta subida aparece la silueta del refugio, situado a la izquierda del camino. Seguimos el amplio sendero y llegamos a este refugio (1.950 m, 1.15 h). La pista se transforma en sendero y el camino sube primero por un área de prados, que en verano están ocupados por el ganado. Poco después penetramos en un tramo no tan bonito, recubierto con matorral de bálec (piorno serrano). Por una zona inclinada nos dirigimos al fondo del valle y nos acercamos al curso del río de Campcardós. Al poco rato, cruzamos el río por unas piedras y llegamos al Estany Petit, y después de pasar unas colinas cubiertas de rododendro, llegamos al Estany Gros (2.076 m, 1.45 h). A partir de los lagos se podría continuar hasta la Portella Blanca de Andorra.