Cerdanya se caracteriza por la gran abundancia de productos autóctonos, gracias a su privilegiada situación geográfica. La cocina de la región es variada, rica y única, con platos típicos y tradicionales provenientes de la huerta, las aves de corral, la ganadería, la pesca y la caza, propios de cada época del año.

Entre la oferta gastronómica destaca principalmente el Trinxat, el Tiró (pato) con nabos, la ensalada de Xicoies (diente de león)… platos que identifican una cocina natural y personalizada, exclusiva de este valle y elogiada por los gourmets que buscan la originalidad de una cocina autóctona.

En este sentido Cerdanya es conocida como comarca gastronómica y, por eso, es el escenario de numerosas jornadas que giran entorno a la gastronomía: Ger (Muestra gastronómica con nabos), Puigcerdà (Fiesta del Trinxat), Prullans («Dijous Gras» con la tradicional tortilla de embutidos)…, etc.